Mujer linterna


Te digo qué hacer, qué sentir, qué decir,

lo que hiciste mal, lo que tenés que corregir.
Y vos me decís que en todo tengo razón,
y en tus ojos de perro ya no hay dolor.

 

Yo te doy un hermoso guion,
para que lo hagas canción...
Pero de pronto preguntás,
si yo me puedo enamorar.

 

Porque doy la impresión de que no,
como las santas que abren camino,
pero su corazón se guarda a Dios,
(y ningún hombre puede ser Dios).

 

Pero quiero decirte la verdad,
toda esa cosa mía me hace mal.
Lo que yo necesito es
quedarme callada,
que el sol me dé en la cara,
que me veas un poco linda
y olvidar que soy una santa.

(Aunque lo soy)

 

Como hacen los perros,
que no hablan,
no piensan,
sólo juegan
y babean...

 

Así que, como sea, cerrame la boca,
no me dejes “iluminarte” la vida,
con mis consejos de mentira.

(Nadie puede saber lo que necesitás).

 

Es mejor hablar de nuestro color preferido

Como hacen “los tontos”, y reír sin sentido.

Aunque te haga bien lo que, “sabia”, te digo.

(A veces los dones son un castigo).

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